Las pieles grasas no son fáciles de tratar. Hay que limpiarlas en profundidad sin que se irriten, con una producto que no las reseque demasiado pero tampoco les aporte más grasa. ¡Ah! Y además que les desinfecte ese granito que acaba de aparecer ¿qué difícil no?

Pues sí que lo es, pero en cosmética ecológica contamos con ingredientes maravillosos que bien mezclados aportan muy buenas soluciones.

Esta crema es un emulsión suave, de textura jugosa, que se extienda fácilmente se absorbe bien y no deja sensación grasa. Es ligera y prácticamente no notarás que la llevas. Justo lo que necesitas.

Su gran efectividad se debe a la mezcla de raíz de bardana y ortiga. Por un lado regulan la secreción grasa de la piel, para que no haya de más ni de menos. Por otro, ayudan a eliminar toxinas y son ligeramente astringentes. En unos días notarás como tu piel se ha equilibrado y van despareciendo esos molestos brillos.

El olor de la salvia, claro , herbáceo y penetrante, te recordará a los bosques mediterráneos. Su aroma te “salvará” la piel, haciendo gala a su nombre.